miércoles, 14 de octubre de 2009

El cambio climático, una clara amenaza para la salud pública

El cambio climático dictará la aparición y agravamiento de patologías, nuevos abordajes y tratamientos, pero también de nuevas políticas de salud pública para hacer frente a los retos que se presenten, según se ha afirmado en el I Congreso Europeo de Patologías Medioambientales.

Isabel Gallardo Ponce. Rouen - Martes, 13 de Octubre de 2009 - Actualizado a las 18:00h.

"Se estima que un 24 por ciento de las patologías globales y un 23 por ciento de las muertes pueden atribuirse a factores medioambientales", según ha afirmado James Creswick, del Centro de Medio ambiente y Salud, en Roma, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), respecto a la influencia del medio ambiente en el desarrollo de patologías, durante el I Congreso Europeo sobre Patologías Medioambientales, que se ha celebrado en Rouen, Francia.

Cada vez se hace más evidente que el entorno está cambiando y desde el año pasado la OMS incide con más fuerza en la inclusión del medio ambiente en las políticas de salud. "Los impactos del cambio climático ya se han hecho notar en Europa", afirma Creswick. De hecho, se espera un aumento de la temperaturas entre 2,3 y 6 grados a finales del siglo XXI. Las olas de calor, especialmente desde la sufrida en Europa en 2003, cada vez son más comunes y más intensas. "La población europea se ha visto afectada pero hay otros efectos, como las inundaciones, la polución, los cambios en las enfermedades vectoriales, y una reducción en la seguridad alimentaria".

El cambio climático parece aumentar las tasas de mortalidad, las enfermedades cardiovasculares y los efectos metabólicos, así como las enfermedades respiratorias, a causa de la calidad del aire, la polución, las olas de calor, y las polinizaciones más tempranas. "Se espera un aumento de los fallecimientos entre un 1-4 por ciento por cada grado de temperatura, y un incremento de muertes de 86.000 personas anuales".

Controlar los riesgos
Por otro lado, en las inundaciones, "se acrecienta el riesgo de contagio de patologías infecciosas, así como de envenenamiento por sustancias tóxicas, estrés postraumático, lesiones, e infartos". También se espera que la mayoría de Europa sufra una sequía que afectará según las estimaciones a entre 16 y 44 millones de personas más en 2080, lo cual aumentará el potencial contaminante y supondrá una pérdida de agua fresca, una reducción de las aguas costeras, y un riesgo de infección añadido para los bañistas y los consumidores de pescado. Al mismo tiempo se calcula que se reducirán los cultivos en un 30 por cierto a mediados de este siglo, especialmente en la zona central de Asia, lo que podría elevar el riesgo de malnutrición.

Desde la OMS se recomienda incluir en los planes de salud pública este enfoque para responder a los futuros retos, así como informar a los ciudadanos de las medidas de prevención que deben tomar. Se debe mejorar y asegurar el acceso a los suministros de agua potable para la población y para los servicios sanitarios. Es "esencial implantar instrumentos nacionales que ayuden a asegurar la asistencia sanitaria y reducir la carga de las muertes y las enfermedades infecciosas. Las medidas deben incluir vigilancia de las patologías infecciosas, vacunaciones, tratamiento del agua y su distribución", además de políticas de vigilancia, prevención y diagnóstico precoz en colaboración con los servicios veterinarios.

Los cambios en la temperatura, en las precipitaciones, en los modelos de transmisión de patologías infecciosas y de su distribución geográfica en términos de latitud y altitud arrojan sobre "el sur de Europa una amenaza. La posibilidad de que los servicios sanitarios realicen una detección y un tratamiento precoz minimiza los riesgos de su expansión".

La OMS ha plasmado todos los protocolos que propone incluir en las políticas de salud pública en el informe Protegiendo la salud en Europa del cambio climático, dirigido a la clase política. Creswick hace hincapié, en la necesidad de involucrar a los facultativos, "que van a enfrentarse a patologías no habituales".

diariomedico.com

No hay comentarios: